
La importancia de educar a las nuevas generaciones de forma diferente
Ayer me pasó algo que me dejó pensando durante toda la noche. Iba caminando por la calle, disfrutando de un momento tranquilo, cuando una niña
Ayer me pasó algo que me dejó pensando durante toda la noche. Iba caminando por la calle, disfrutando de un momento tranquilo, cuando una niña
Hace unos años, por supuesto antes de la pandemia, decidí hacer una visita a la Sierra de Francia, en Salamanca. La verdad es que era
En una era donde la tecnología ha tejido una red que nos mantiene conectados virtualmente pero nos distancia emocionalmente de nuestros seres queridos, descubrir la
Cada vez son más las personas que optan por unas vacaciones verdes e inolvidables. Unos días alejados de la civilización y más cercanas al descanso de la naturaleza y a los paisajes teñidos de flora, fauna y de un sentimiento de paz y tranquilidad puede hacerle mucho bien al cuerpo.
Llamadme tiquismiquis, especialito o exigente. Llamadme lo que quieras, pero ahora mismo vivo en una sociedad en la que hay que mantener un mínimo de exigencias para todo. Y por ejemplo, hoy quiero hablar del nivel de exigencia que me he puesto cuando entro a un bar. Son temas ecológicos, de sanidad, de profesionalidad y de calidad que no podemos dejar pasar por alto. Y es que si hacemos que todos los establecimientos mantengan un mínimo de calidad, vamos a hacer que el listón se ponga más alto. Nos olvidaremos de las famosas tascas.
Ahora que por fin podemos viajar, después de unos duros meses de pandemia, es el momento de hacer las maletas y disfrutar de España y del mundo. Eso sí, para las personas que tienen animales siempre tenemos la misma duda, ¿podemos viajar con ellos? Son muchas las preguntas que nos hacemos. Y es que es duro separarnos de ellos, y sobre todo, no siempre sabemos si las personas con las que dejamos les van a dar los cuidados necesarios.