La sociedad está más concienciada que nunca con temas relativos al cuidado del medioambiente. Y no es para menos, dada la situación en la que se encuentra nuestro planeta. Tenemos que ser conscientes de la situación en la que nos encontramos: el alto consumo de combustibles fósiles ha provocado que la situación sea crítica y que tengamos más problemas que nunca en lo que tiene que ver con el cuidado de la Tierra. La temperatura media del planeta está subiendo y los problemas como la polución son más evidentes que nunca, haciendo que especialmente las grandes ciudades tengan graves perjuicios en lo que tiene que ver con la calidad de su aire.
Como es lógico, desde distintas administraciones y contando con iniciativa privada, se han puesto todo tipo de medidas orientadas a terminar con problemas de los que estamos hablando. Por un lado, debemos destacar que se ha producido la llegada de un montante muy importante de vehículos eléctricos e híbridos para reducir la dependencia de los combustibles fósiles. También se ha reducido la presencia de bolsas de plástico y se ha apostado por una alimentación ecológica que está cada vez más popularizada y que está ligada a productos de calidad, más artesanos y que contienen menos pesticidas. No cabe la menor duda de que hemos empezado a tratar el problema, pero que falta mucho camino por recorrer para solucionarlo del todo.
Una de las cosas que venimos notando en los últimos tiempos es que también se ha incentivado un modelo de turismo que es más respetuoso con el medioambiente: el turismo rural. Decimos que es más verde por el hecho de que desincentiva el uso del avión, que es el medio de transporte que más combustible utiliza, y porque permite que haya pueblos de los que mucha gente se habría olvidado en caso de que en ellos no existieran opciones de alojamiento en materia de turismo rural, generándose de este modo la posibilidad de que se cuiden parajes y se apueste por la instalación de zonas verdes y el cuidado de la naturaleza en este tipo de lugares.
Hay bastantes datos que ponen de manifiesto que el turismo rural se ha convertido en una de las grandes preferencias de los españoles. Una noticia publicada en la página web de la agencia de noticias Europa Press aseguraba que casi la mitad de los españoles mayores de edad hizo turismo rural en el año 2023, un dato que superaba el del año anterior. Y, de hecho, las previsiones que se tenían para el año 2024 eran todavía mejores que las que se manejaron en 2023. Después de la pandemia, se ha producido un avance considerable en este sentido y estos datos lo demuestran por completo.
Pero es que, según una noticia publicada por el Cett – Barcelona School of Tourism, Hospitality and Gastronomy, el turismo rural había cerrado el 2023 al alza en todos los indicadores: más viajeros, más escapadas y más gasto en destino. No cabe la menor duda de que ha cambiado la manera de hacer turismo de los españoles y españolas y que viajar para desconectar de verdad se ha convertido en una prioridad. A fin de cuentas, cuando vamos a la playa seguimos sufriendo los males de los ruidos o el estrés. Cuando viajas a un pueblecito, la cosa es bien diferente. Ahí sí que se apuesta por una desconexión de verdad. No sufriremos ruidos, problemas de aparcamiento o problemas derivados de la presencia de una enorme masa de gente.
Normalmente, cuando se trata de incentivar el turismo rural en alguna zona, las empresas de la región se suelen reunir para trazar estrategias en común. En este tipo de industria podemos encontrar entidades de todo tipo: hoteles rurales, restaurantes, tiendas de souvenirs, empresas encargadas de la realización del tours y visitas guiadas… y también es importante que en esas reuniones se citen a personas del ayuntamiento en cuestión o de la provincia. Una estrategia conjunta es idónea para esto y lo que se suele hacer en este sentido es alquilar salas de reuniones para que el espacio sea lo más neutral posible. Hemos charlado con los responsables de Mitre WorkSpace y nos han indicado que en sus instalaciones ya se han organizado varias reuniones precisamente de este tipo porque la cantidad de tamaños y distribuciones con las que cuentan sus salas las convierten en espacios idóneos para reuniones como de las que estamos hablando. De ese modo han surgido grandes ideas para fomentar el turismo rural y hacer de la industria turística, por tanto, un poco más sostenible.
Algunos beneficios ligados a este modo de turismo y que los turistas destacan continuamente
Son varias las cosas de las que podemos hablar en este sentido.
- La tranquilidad. El silencio es uno de los bienes no materiales más demandados cuando estamos de vacaciones y queremos relajarnos. Un entorno rural es idóneo para ello.
- La buena comida. Cuando estamos en una ciudad con masificación de turistas, los establecimientos de hostelería normalmente sirven comidas de escasa calidad porque no cuentan con el tiempo suficiente para prepararlos. En un entorno rural, que cuenta con una menor concentración de gente, los establecimientos sí apuestan por la calidad de los menús.
- Los paisajes. Las diferentes rutas ofrecen paisajes que, en muchos casos, son mucho más que espectaculares. De hecho, muchas veces no parece ni siquiera que estemos en España.
- El precio. Suele ser mucho más barato acudir a un sitio propicio para hacer turismo rural que a la playa, por ejemplo, donde el precio se ha inflado de una manera desproporcionada de un tiempo a esta parte.
El turismo rural, como veis, cuenta con una base sólida para ser una experiencia para todo tipo de personas. Además, puede ser un plan perfecto para familias, para parejas o incluso para parejas de amigos. Hay mucha gente que ha decidido organizar una despedida de soltero en un entorno como del que estamos hablando y que se ha marchado muy satisfecha con la elección que ha tomado. La verdad es que, para olvidarnos de la rutina y de las preocupaciones ocasionadas por el día a día, viajar a un sitio que cuente con buenas reseñas en lo que tiene que ver con turismo rural es siempre una gran idea.
Teniendo en cuenta que es una opción sostenible y respetuosa con el medioambiente, podemos deducir que hace falta que todavía lo tengamos más en cuenta a la hora de planificar nuestras vacaciones. No cabe la menor duda de que al planeta le hace falta que apostemos por esto y que dejemos de lado otras formas de turismo que implican el consumo de toneladas y toneladas de combustible. Eso, considerando que España es un país que cuenta con una buena nómina de ubicaciones en materia de turismo rural, hace que tengamos que probar esta experiencia sí o sí. Al menos, debéis intentarlo en una ocasión para saber si os convence.
La pandemia nos ha abierto los ojos
Desde que la pandemia empezara a remitir, el turismo rural se ha convertido en una de las opciones preferentes para disfrutar de unas más que merecidas vacaciones. Dicen que no hay mal que por bien no venga. No vamos a decir que la pandemia fue una buena noticia ni mucho menos, pero es verdad que ha permitido que le demos una vuelta a la manera que tenemos de viajar y de disfrutar de nuestros días de vacaciones. Ahora se valora mucho más poder estar tranquilos que usar estos días para seguir agobiados por culpa de atascos, prisas para coger un buen sitio en la playa u otras cosas de este estilo.
Parece que estamos hablando de un cambio que se va a mantener por muchos años. Ya ha pasado tiempo desde que acabara la pandemia de manera oficialmente. Las últimas restricciones cayeron a lo largo del año 2022 y mucha gente, a pesar de que ya se podía mover libremente y hacer las actividades que realizaba por sus vacaciones antes de que llegara la pandemia, eligió hacer turismo rural porque había aprendido a valorar la tranquilidad, el silencio y la calidad de muchos de los paisajes rurales de los que se puede disfrutar en un país como el nuestro, que no son pocos y que tienen argumentos más que de sobra para ser visitados.
Ojalá que esas ganas de disfrutar de lo rural no decaigan nunca. Es algo que implica ganancias para todos y todas. Nosotros ganamos en calma, en salud mental, en disfrutar de tiempo de calidad. Y la Tierra gana también en salud si no continuamos haciendo que se invierta una enorme cantidad de carburante en desplazamientos, sobre todo en avión. Tenemos que ser conscientes de que jugamos un papel muy importante a la hora de conseguir una mejora en el estado de salud de nuestro hogar. Nosotros y nosotras seremos los principales perjudicados y perjudicadas cuando lleguen las consecuencias de nuestra pasividad en relación a ese cuidado que demandamos para el planeta.